Hoy (después de casi cuatro meses sin salir por Yecla),
he visto a alguien
que echaba de verdad de menos.
Y son cosas
que fluyen.
Que ocurren.
De repente,
te das cuenta
que todo es distinto.
Ahora lo ajeno
es lo antes conocido.
Lo vulgar.
Hablas,
pero ya no te expresas
igual que cuando selectividad.
Es algo que te invade.
Inalienable
a tu nueva condición.
He quedado para
tomar cañas.
En una o dos semanas.
Supongo que llamaré.
Y que la tarde será
estupenda.
domingo, 12 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Nota del administrador: Ups! He borrado por error el anterior comentario. Mil perdones
Publicar un comentario