Gales 23-15 Inglaterra.

Inglaterra vendió cara su derrota.

Ilusionó Inglaterra la semana pasada y así lo hizo también esta hasta casi el final del partido. Gales llegaba a su primer test serio en este VI naciones sin su estrella Williams, pero no lo echó demasiado en falta durante los primeros veinte minutos en los que se puso 9-0 con tres golpes de castigo. Cuando parecía que los del Dragón le habían comido la moral a los ingleses, éstos resucitaron con un ensayo espectacular, previa colaboración de Goode, de Sackey en el 23’ y un drop de Goode en el 29’. Inglaterra aguantó las acometidas galesas sacando dos importantes balones de su 22 en los últimos minutos del primer tiempo. Con el 9-8 se llegaba al ecuador del partido en el Millenium Stadium, en el que estaba siendo el partido más vibrante del torneo hasta la fecha. Sin embargo, todo se torció para los de la Rosa con la amarilla a Goode tras la reanudación. El penalty ponía el 12-8 y un minuto después Halfpenny consiguió el ensayo (sin conversión) que significaba el 17-8. En el 53’ los ingleses concedían un nuevo penalty (20-8). Otra vez los del Dragón andaban con tranquilidad sobre el campo y otra vez volvió a resucitar Inglaterra con un ensayo de Armitage en el 56’ y la conversión, 20-15 y 23 minutos de partido por delante. Inglaterra se vino arriba y realizó muy buenos minutos entrando mucho en juego sus terceras y no abusando demasiado de riñón. Pero fue un querer y no poder, pues Gales no estaba por la labor y frustró una y otra vez cualquier intento de romper su línea defensiva por parte de los XV de la Rosa. El partido quedó finalmente cerrado en el 73’ con un nuevo penalty transformado por Jones. 23-15 final e Inglaterra se arrepintió de conceder tantos golpes de castigo (18 ptos totales) que le hicieron perder el encuentro. Gales prosigue su camino en la defensa del Grand Slam y sale airosa de este primer test en el que la suerte y el pragmatismo fueron importantes aliados para los del Dragón.